Red Bull podría patrocinar al Valencia

Que el departamento de marketing, con Louis Dowens a la cabeza, está estudiando diferentes formas para mejorar los ingresos por publicidad no es algo nuevo. En uno de esos movimientos se ha barajado la posibilidad de que Red Bull, conocida marca de bebidas energéticas, sea el nuevo patrocinador del Valencia C.F., llevando su marca estampada en la nueva camiseta Adidas a razón de 6 millones de euros por temporada. Sin duda una gran noticia que mejoraría considerablemente los ingresos que se reciben ahora de Jinko Solar.

foto de tenvinilo.com

Hace varias semanas viajaron a Austria Louis Dowens, como director de marketing del club, y Manuel Peris, consejero del club del área comercial. En este viaje hubo una reunión con los responsables de la marca donde expusieron el proyecto GloVal y presentaron varias lineas de trabajo para que el presidente de la compañía de bebidas las estudiara. Los responsables de Red Bull se comprometieron a dar una respuesta antes de que finalice la actual temporada.

Parece ser que, entre las diferentes propuestas presentadas, se encontraban la de poner el nombre de Red Bull al nuevo estadio, y la del patrocinio de la camiseta. A la primera propuesta, Red Bull no parecía estar muy dispuesta, ya que exigía una serie de condicionantes que el Valencia, en estos momentos y con el proceso de venta abierto, no podía satisfacer. Sin embargo sí que mostraron cierto interés en estampar su logotipo en la futura camiseta valencianista. El hecho de que el Valencia vaya a vestir Adidas la próxima temporada ha sido un punto muy a favor para intentar convencer a Red Bull, ya que lo ven como un buen escaparate a la hora de poder expandir la marca por todo el mundo, algo que, lógicamente, con Joma es imposible.

Como dato curioso hay que apuntar que no es la primera vez que Louis Dowens se reune con Red Bull. Ya hace algún tiempo que hubo contactos, aunque esa vez fue con la Fórmula 1 como objetivo. Fu en una de las ediciones del Gran Premio de Europa, Gran Premio disputado en Valencia, y ya por aquel entonces Dietricht Mateschitz (dueño de Red Bull) quedó maravillado con las posibilidades que daba la ciudad de Valencia.